Sin recuentos...

Por costumbre o tradición, en la proximidad del fin de cada año se suelen hacer recuentos, yo prefiero hacerlos en mi propio hito: mi cumpleaños, aunque alguna vez creo que hice alguno y lo publiqué aquí...

Este año no habrá recuentos, me basta con sentirme bien, como me siento, que es el resultado de cada paso, de cada decisión, de cada esquina que elegí doblar, de cada cosa que dije o que callé, de cada evaluación en la que traté de ser lo más objetiva posible, de lo que aprendí y, sobre todo, de lo que desaprendí. Me encantan unos versos de Bendetti en los que dice que es mejor cantarse las verdades que llorarse las mentiras y creo que ese es uno de mis logros. Puede que alguna vez -muchas para mi gusto-, prefiriera cerrar los ojos y no ver lo evidente -así me fue-, pero a estas alturas del "partido", me dejé de esas y la verdad al desnudo que yo me canto me llena muchísimo más...

Queda todo un camino por delante hasta llegar al horizonte y trataré recorrerlo con todo lo mejor que hay en mi, soltando lastres y llenándome el corazón con los sueños que se me vayan haciendo realidad, pero sin dejar de soñar nunca, porque eso sería quedarse sin gasolina para el largo camino que -espero- me queda por recorrer...

Desde ahora les deseo un año nuevo mágico y lleno de Amor... teniendo eso lo demás viene solito, ¿verdad?

¡Gracias por la compañía y el cariño!

¡Feliz 2007!

PS) La fotito me la traje del blog "Apuntes de mis tripas": ¡Gracias Marxxiana!