viernes, diciembre 08, 2006

El pintor de batallas...

De cualquier modo, ella había tenido razón. Tres años era poco tiempo, aunque ninguno de los dos podía calcularlo. Esa primera noche en México DF, Faulques, que para entonces ya consideraba el mundo a la luz de sus paradojas y convergencias, pensó que su nombre era Olvido; y supo de golpe, con la precisión fugaz de una fotografía percibida en un instante, que ella era lo único que no podría olvidar nunca.

Ahora, por las ventanas abiertas de la torre llegaba el rumor de la marejada creciente al pie del acantilado, mientras el pintor de batallas miraba el volcán en la pared. En ese momento, el alcohol ingerido, la penumbra o un efecto de luz del farol de gas hicieron cruzar una sombra ante sus ojos. Estremecido, buscó el lugar del vasto mural donde aquella sombra había ido a esconderse. Al cabo de un instante movió la cabeza. Es oscura, murmuró recordando, la casa donde ahora vives...

Arturo Pérez-Reverte
"El pintor de batallas"

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Fuerte e intenso, me encantó este libro, gracias por recomendármelo, amigui
Bechitos!

El Trimardito dijo...

Me gustó mucho.