domingo, junio 26, 2005

Ámame...


Ámame cuando menos lo merezca...
será cuando más lo necesite...

Dr. Jeckyll

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Esa idea va con la de "amar a nuestros enemigos", algo tan dificil de lograr. Casi un imposible para el ser humano.
Lograrlo, sería alcanzar un nivel mental extraordinario. Trataremos...

Azul... dijo...

Tiene que ver con la comprensión de que no vale la pena gastar energías en sentimientos negativos que, a la larga (más bien, a la muy corta), se vuelven contra quien los experimenta... ¿La verdad? No es tan dificil cuando comprendes que el Amor es el camino, no importa quién sea tu dios...

Gracias por asomarte a estas páginas Azules... =o)

Anónimo dijo...

LA LEY DEL PERDÓN
"Es una ley mental inquebrantable que uno tiene que perdonar a otros si quiere superar las dificultades y lograr un verdadero progreso espiritual.
Quizá la importancia vital del perdón no sea obvia a primera visita, pero puede estar seguro de que no es simple coincidencia que todo gran maestro espiritual, comenzando por Jesucristo, haya insistido tan enérgicamente en el perdón. Debe perdonar las injurias, pero no sólo de palabra o como una cuestión formal, sino sinceramente de corazón; así es. Usted no perdonará por el bien de otra persona, sino por su propio bien. Para esa persona el perdón no significará gran cosa (a menos que fije una serie de valores a partir del perdón), pero para usted tendrá una gran significación. El resentimiento, la condena, la ira, el deseo de ver a alguien castigado son cosas que corrompen su alma por muy astutamente que usted disimule esos sentimientos, como esas cosas tienen un contenido emocional más vigoroso de lo que cualquiera sospecharía le afianzan sus problemas, los remachan. Lo encadenan a muchos otros problemas que en realidad no tienen nada que ver con los agravios originales.
Perdonar no significa que usted debe simpatizar con el delincuente o que quiere conocerlo sino que usted debe desearle el bien. Usted, por supuesto, no debe permitir imposiciones o malos tratos debe librar sus propias batallas, y librarlas con oraciones, justicia y buena voluntad no importa que usted pueda olvidar la injurias o no, aunque si usted deja de pensar en ellas, probablemente las olvide pero debe perdonar."

Desconozco el autor de estos pensamientos pero los traigo aquí pq los comparto.Pienso que quién tiene la desgracia de ser portador del mal es quién más necesita ser perdonado,pero que perplejos nos quedamos cuando el perdon no alcanza...

un beso

Max

Anónimo dijo...

"Puede que el amor no quiera ser palabra o estátua,
cuando es tranquila verdad "

Antonio Marín Segovia


un beso

Max