lunes, abril 30, 2012

Una rosa para el Almirante...


Aunque a veces no sé si agradecérselo o no, Almirante...
no hay duda de que mi historia comenzó porque Ud. un día
tuvo un sueño y fue tras él... aunque en un principio
ni Ud. mismo se diera cuenta de la magnitud
de ese sueño hecho realidad... ni se imaginase
siquiera que su travesía sería el inicio de
millares de historias, entre ellas,
la mía...





PD) Lástima que para la Madre Patria
el mundo siga siendo plano y se acabe
justo en las costas africanas... ojalá
pudiera ver cuánto se la quiere
del otro lado del charco...

lunes, abril 23, 2012

In memorian



Hace mucho que no escribo en primera persona y no se si ahora saldrá algo digno de la persona que me ha traído aquí, pero sabe Dios que cada palabra nace de mi adolorido corazón.... 

No teníamos  la misma sangre, pero la adoraba. Era mi Bibi, mi abu, la única abu que conocí y la más maravillosa de todas. No, no era perfecta, pero no le hacía falta. Su fuerza de carácter, su estoicismo eran una luz para quienes la amamos. Me dijo te quiero con el solo hecho de dejarme llamarla Bibi, cuando a los que sin permiso lo intentaban les decía "Elba de Pérez", dejando claro que a ella no la llamaba Bibi cualquiera, sino quien ella quisiera. Y fuimos pocos, pero adorados.

Me quedo con la tranquilidad  de que te dije cuánto te quiero en vida. Me quedo con el enorme tesoro de saber que también me querías. Me quedo con tu enorme sonrisa. Con tu figura menudita y tu voz profunda. Con la fuerza de tu espíritu, que luchó por años contra un físico que no te acompañó. Con la maravillosa nieta que criaste y que es más que mi comadre, mi amiga, mi hermana, mi otra mitad. 

Se que te quedas viva en nosotras, en las orquídeas, en los tangos, en los recuerdos.... Perdóname las lágrimas y la tristeza, Bibi. Yo se que ahora estás feliz y libre de tanto sufrimiento físico, pero saber que no voy a verte más cuando regrese a Caracas, me parte en mil pedazos...

Te quiero. Gracias por dejarme formar parte de tu corazón. Ahora más que nunca tú vives en el mío...

Mary Carmen

lunes, abril 16, 2012

Los Cuatro Acuerdos...


El Primer Acuerdo: 
Sé impecable con tus palabras

El Segundo Acuerdo: 
No tomes nada personalmente

El Tercer Acuerdo: 
No hagas suposiciones

El Cuarto Acuerdo: 
Haz siempre lo máximo que puedas



Miguel Ruíz
"Los Cuatro Acuerdos.
Un libro de Sabiduría Tolteca"

lunes, abril 09, 2012

Fuegos...



Un hombre del pueblo de Neguá, en la costa de Colombia, pudo subir al cielo. A la vuelta, contó. Dijo que había contemplado, desde allá arriba, la vida humana. Y dijo que somos un mar de fueguitos.

- El mundo es eso - reveló-. un montón de gente, un mar de fueguitos. Cada persona brilla con la luz propia entre todas las demás. No hay dos fuegos iguales. Hay gente de fuegos grandes y fuegos chicos y fuegos de todos los colores. Hay gente de fuego sereno, que ni se entera del viento, y gente de fuego loco, que llena el aire de chispas; algunos fuegos, fuegos bobos, no alumbran ni queman, pero otros arden la vida con tantas ganas que no se puede mirarlos sin parpadear, y quien se acerca se enciende...


Eduardo Galeano...
Fragmento de
"El Libro de los Abrazos"



lunes, abril 02, 2012

El Camino de Saberse...




Es bastante común y, digo yo, bastante siniestro,
analizar nuestras acciones y pensamientos
con frases del estilo:




"¡Qué tarado soy!"
"Tendría que haberme dado cuenta..."
"¿Cómo puedo ser tan estúpido?"
"¡Me quiero matar!"
Etc., etc.


Yo digo que si uno pudiera transformar eso
en una actitud más aceptadora, más cuidadosa,
si uno pudiera decir:


"Me equivoqué. La próxima vez puedo
tratar de hacerlo mejor..."
"Quizá sea bueno tomar nota de ésto..."
"Lo hice demasiado a la ligera,
mi ansiedad a veces no me sirve..."
"De aquí en adelante voy a buscar
otras alternativas..."


Entonces los cambios serían
paradójicamente más posibles.
Nadie hace un cambio desde la exigencia.
Nadie se modifica de verdad por el miedo.
Nadie crece desde la represión.


Qué bueno sería dejar de estar ahí,
criticones y reprochadores...


Éste es el único camino porque, en realidad, yo
voy a tener que estar conmigo por el resto de mi
vida, me guste o no. Corta o larga, mucha o poca,
es mi vida, y voy a tener que estar a mi lado.

La palabra amigo se deriva de la suma
de tres monosílabos: a-me-cum.
Aquel que está al lado, conmigo.
Qué bueno sería enrolarnos en esa lista.
Ya que voy a estar conmigo para siempre,
qué bueno sería, entonces, ponerme
conscientemente de mi lado...


Ya que estoy conmigo desde el principio y nadie
sabe más de mí que yo (nadie, ni siquiera mi terapeuta),
qué bueno sería ser un amigo de mi mismo, estar al
lado mío haciendo y pensando en lo mejor para mi.

Querer hacer de mi mismo algo diferente de
lo que soy no es el camino de saberse, es el
camino de cambiarse. Y te digo desde ya...
intentar cambiarse no construye,
es el camino equivocado, es un desvío,
es una pérdida de rumbo.

El camino de saberse empieza en aceptar que
soy ese que soy, y trabajar partiendo de lo
que voy descubriendo para ver qué voy a hacer
conmigo, para ver cómo hago para ser mejor,
pero sabiendo que está bien ser como soy, y
en todo caso, estará mejor si puedo
asistir a ese cambio.


A veces el cambio es explorar una ruta que
nadie antes ha recorrido...


Jorge Bucay
"El Camino de la Autodependencia"